En su decimotercer cumpleaños, los padres de Ana Frank le dan un diario. Está emocionada porque quiere a alguien, o algo, en lo que confiar todos sus pensamientos secretos. Aunque tiene una vida social rica, se siente incomprendida por todos sus conocidos. Ana Frank comienza a escribir sobre eventos diarios, sus pensamientos, calificaciones escolares, niños, todo eso.